Niquía - Corrales
Descripción del recorrido
Distancia: 9 km.
Clima: Cálido
Grado de dificultad: 4 de 1 a 5 (siendo 1 el más suave y 5 el más difícil)
Topografía: El recorrido es con una subida fuerte de 1.420 m.s.n.m. hasta 2.260 m.s.n.m para luego bajar nuevamente hasta 1.420 m.s.n.m
Tipo de camino: este recorrido lo haremos por un camino empedrado antiguo que dicen que era indígena.
Atractivos: el paisaje del Valle de Aburrá; flora de bosque seco tropical y la avifauna; quebrada La Seca y Corrales, sitio ceremonial desde tiempos de los indígenas.
En esta caminada tenga en cuenta: llevar vestido de baño si se desea bañar en la quebrada. Tener mucho cuidado en no salirse del camino, pues la quebrada tiene acantilados muy peligrosos que ha cobrado varias vidas humanas. Llevar mínimo 3 litros de agua por persona pues el clima es caliente y exigente.
Toda la zona estuvo habitada antes de la llegada de los españoles por indígenas bajo el mando del cacique Nichía (Niquía), es un sitio de gran valor arqueológico, donde se han encontrado los vestigios de las civilizaciones más antiguas del valle del Aburrá, aproximadamente de 10.000 años. Han sido halladas puntas de lanzas, vasijas y otros artefactos de barro y piedra que se encuentran en exposición permanente en el Museo de la Universidad de Antioquia. El primer colono fue Gaspar de Rodas que llegó entre 1575 y 1580 y formó allí su primer hato de ganado, dándole al sitio el nombre de Hato Viejo, que le fue cambiado en el siglo XIX por el de Bello en honor a Andrés Bello.
El recorrido se inicia en la Estación Niquía del Metro en Bello. Empezamos a subir hacia el Parque de los Toboganes, donde empieza la Reserva Ecológica del Municipio de Bello para protección de aguas, recuperación de suelos, flora y fauna; bordeamos un tramo de la quebrada La Seca, rica en pozos para baños en medio de acantilados negros. Al pasar la quebrada empezamos a ascender por un valiosísimo camino indígena, hecho en lajas de piedra de dunita serpenteante, piedra que brilla con el sol y la luna llena, lo cual le indicaba desde lejos el camino a los indígenas. Llegaremos a almorzar a Corrales, sitio de espectacular belleza y antiguo asentamiento de adoración de los Niquías donde aún se conservan las terrazas de cultivo y la Piedra de los sacrificios.
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